Sandra e Ignacio acaban de divorciarse. En común tienen un matrimonio de trece años que no funcionó y un hijo de doce, que no acepta la nueva situación de sus padres. Así que, mientras los dos se esfuerzan por reconstruir sus vidas lejos de sus ex, se ven obligados a encontrarse más de lo deseable para tomar decisiones sobre su hijo.
Comedia ácida que plantea un problema serio y complejo: el de los llamados niños-mochila, aquellos hijos que son empleados como armas dentro de las parejas. Una visión de cómo los adultos podemos ser mucho más mezquinos y egoístas de lo que creemos, y una reivindicación de los nuevos y múltiples modelos de familia que nos ofrece la realidad del siglo XXI.
La Asociación Cultural Preludio ha estrenado De mutuo desacuerdo, una obra que aborda la difícil realidad de los llamados “niños-mochila”, hijos que son usados como instrumentos de disputa tras un divorcio. La puesta es dirigida por Daniel Veronese.
Oficio Crítico entrevistó a Marco Zunino y Ximena Díaz, destacados actores que interpretan a Ignacio y Sandra, una pareja separada que lucha por adaptarse a la crianza compartida.
El montaje se presenta en el nuevo Teatro Municipal de Surco, con funciones de jueves a domingo. Las entradas están disponibles por Teleticket y la propuesta invita a reflexionar sobre los nuevos modelos de familia sin estigmas ni etiquetas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario