Crisis de identidad en tres cuadros
La casa Espacio Libre continúa con la tradición de ofrecer espectáculos
alternativos de calidad, así como laboratorios de actuación, que desembocan en
montajes profesionales del grupo, todos ellos muy elaborados bajo la dirección
de Diego La Hoz. También les ofrece la oportunidad a jóvenes artistas para
concretar sus proyectos escénicos: Diana Hurtado presentó en enero Trilogía de una despedida, una antología teatral de cuadros que trataban el tema de la
soledad como resultado de las partidas conscientes y forzadas. Ahora le toca el
turno al grupo Molinos de Viento, con la puesta en escena de Tres (monólogos de
distintos autores), otra antología teatral que no desmerece la calidad que se
venía exhibiendo en el íntimo espacio de Barranco.
Tres (monólogos de distintos autores) es un espectáculo que reúne un trío de propuestas trabajadas por alumnos de la ENSAD, cada una diferente e independiente de la otras en
cuanto a su tratamiento, pero que abarcan temas en común como el machismo, la pérdida
de la identidad y la sexualidad. Miguel Torres (director del grupo Molinos de
Viento) se encarga de El novio y su amigo, que a su vez es parte de la pieza
Dos para el camino de César De María. Johann Allpas presenta David que no fue
Brenda, sentido unipersonal sobre un frustrado experimento de cambio de sexo,
escrito por el psicólogo Andrés Caro Berta. Y Toto Jorge Flores le da vida a un
drag-queen, tanto fuera y dentro del escenario, en Un extraordinario homenaje, escrito por Daniel Dillon.
A destacar la propuesta en conjunto, que no busca unificar los
monólogos, sino darle a cada uno su propio espacio. El trabajo en general de
los actores es bastante parejo: Torres mantiene el suspenso y el ritmo durante su
conversación, y Flores resulta sumamente espontáneo al dirigirse a los
espectadores para anunciar su trágica noticia; pero cabe destacar la energía y
convicción de Allpas para recrear en escena a cada uno de los personajes
involucrados en su historia. Tres es un formato de antología teatral muy
interesante, que bien vale la pena apreciar en el futuro. Y Espacio Libre se
consolida como una parada obligatoria para los que buscamos teatro alternativo
del bueno.
Sergio Velarde
31 de marzo de 2014