martes, 16 de febrero de 2021

Crítica: OCÉANO ATLÁNTICO y CUANDO _NO TE PROTEGE


El teatro no para, el Festival tampoco

El convivio en una sala teatral aún es incierto en nuestra realidad. Sin embargo, el artista ha demostrado que posee la potencialidad para seguir mostrando su mundo interior en su arte. Por este motivo, la XX edición del Festival Saliendo de la Caja continuará desarrollándose como todos los años, pero ahora a través de la virtualidad. Este festival es producido por la Especialidad de Creación y Producción Escénica de la Facultad de Artes escénicas de la PUCP. Además, su objetivo precede en la esencia de presentar los trabajos de los y las estudiantes de la misma casa de estudios. En esta edición también se presentan las siguientes video performances: Océano Atlántico (Sebastián Valge) y Cuando _no te protege (Alesandra Reto). Ambos se presentaron el domingo 7 y 14 de febrero a través de la plataforma de Joinnus.  

El dolor: un viaje emocional

Solo por un instante, recordemos ese desventurado momento cuando esa persona favorita nos dijo adiós por última vez. Posiblemente, la separación fue por tema de trabajo, una beca de estudios en el extranjero o la consumación de esa llama que conocemos como amor. En realidad, no importa tanto el motivo. Aquello que sucede dentro de nosotros es lo que nos incumbe. Pues nuestro mundo interno se desmorona; el océano azul nos golpea y hasta puede ahogarnos. Pero solo depende de nosotros si esquivamos esa bala perdida. De una forma análoga inicia Océano Atlántico, video performance perteneciente a la presente edición del Festival Saliendo de a Caja. La creación y realización de está obra esta dirigido bajo el concepto de Sebastián Valge, artista de la casa de estudios PUCP.

La superación tras la separación del ser amado es un largo viaje. Sobre este argumento se basa la obra de Valge. Pues el héroe de la historia recorre por una travesía difícil de sostener. Además, compara el mundo interior del personaje con un océano que lo envuelve en el sumergimiento imposible de emerger.

Océano Atlántico es una performance que presenta varios signos teatrales y metáforas relacionados con su nombre. Por un lado, a nivel general, los objetos contenían significados relacionados con el mar. En ese sentido, desde el inicio, Valge introduce al espectador a su mundo. Pues colorea un ambiente oceánico: la obra inicia con un fondo negro acompañado del sonido del océano. Además, la luz de la escenografía también se encuentra relacionado con el mar porque su iluminación es azul. Por otro lado, a nivel textual, el parlamento contiene varias palabras que juegan metafóricamente con el océano. Así, Océano Atlántico se torna en un viaje sensorial para el espectador.

Un recurso bien utilizado por Valge son las videocámaras, ya que permitió conocer bien su espacio escénico. En ese sentido, desde un ángulo cenital (plano desde arriba hacia abajo), permitió que el espectador observara su mundo. Además, la acción de llevar consigo otra videocámara (su smartphone) también sumó a su propuesta, ya que invitaba a conocer más su intimidad.

Una característica del actor creador es su mundo lúdico y explorador. En ese marco, Valge no solo cuenta la historia con su expresión corporal o vocal, sino, también con el uso de objetos como el lego. Así, representa la separación a través de las LEGO Minifigures. En el transcurso de la fábula, el intérprete trasmite su historia colocando a estos como signos teatrales. Además, gracias a estos personajes más la vista cenital se puede entender la conjunción de todos los signos.

En el final de la obra, los intérpretes proyectan Yo vengo a ofrecer mi corazón, canción compuesta por Fito Páez, cantada por Susana Baca a capella. El personaje también canta una estrofa de la canción.

Océano Atlántico es una historia que cuenta una experiencia. Es la historia de alguien. Puede ser tu historia o mi historia. ¿Quién no ha sufrido alguna vez por el abandono del amado? ¿Quién no ha sufrido por esas promesas rotas? ¿Quién no ha sufrido por esos “TE AMO” que jamás se escucharán? El recorrido hacia la superación es dura. Así, la video performance nos hace reflexionar sobre el duelo y dolor emocional presentes luego de una ruptura.

Somos seres humanos, seres con emociones y sentimientos. Este dolor no distingue edad, sexo o color de piel. Aquí no hay frases que valgan como “Los hombres no lloran”. Pues el dolor emocional nos hace humanos. Aunque vivimos en una sociedad en la que nos repite que debemos estar siempre bien; y que el dolor es malo. Eso no es totalmente cierto. El dolor es una emoción negativa, pero no mala. No existen emociones malas. Además, si se trata de luchar contra esa emoción, al final no terminará de desaparecer. Tal como cuenta Valge, el duelo nos puede sumergir en un vaso con agua; y nosotros dando vueltas ahí. Pero depende de nosotros si podemos gestionar esa emoción y superarla o no. Así como dice Fito Páez: “No será tan fácil, ya sé que pasa. No será tan simple como pensaba. Cómo abrir el pecho y sacar el alma, una cuchillada de amor”.

En resumen, Océano Atlántico es una propuesta en la que su creador juega muy bien con los signos. Además, combina muy bien el lenguaje teatral y audiovisual. En la proyección, la inconexión por unos segundos jugó un autogol, pero eso no quita que el trabajo haya sido impecable.



Sátira a los medios de información, el Estado y la sociedad

Hace dos años, los noticieros informaban sobre la injusticia contra una niña. Pues, ella había sido abusada por su primo de trece años. La niña de ocho años junto a su madre había solicitado ayuda a algunas comisarías de Comas, pero los policías respondían lo siguiente: “(…) está menstruando”. Este es el argumento de la obra Cuando _no te protege, video performance interpretado por Alesandra Reto; además, también presentada en la presente edición del Festival Saliendo de la Caja.

Cuando _no te protege es una obra que satiriza el abuso contra una niña, pero por el mal accionar de las “autoridades” del orden público. En ese sentido, la video performance presenta la estructura de un chiste contado en tres actos. Además, el personaje los cuenta con una perspectiva informativa, como si un reportero lo esté informando. Esta estructura se repite dos veces y al final, el público debe responder cómo se llama la obra.

La obra presenta varias imágenes conjugadas entre sí. Por un lado, inicia con la imagen de una niña. Luego la videocámara enfoca sus pies contra el suelo. En este lugar también toma lugar un lazo negro. Finalmente, este juego de imágenes termina con bullicios de un grupo de personas. El vocerío remite a un lugar populoso de Lima, así como el Jirón de la Unión o la Alameda Chabuca Granda. Por otro lado, en un fondo negro aparece un espectro con aspecto mefistofélico. Este signo marca el ritmo de la historia, ya que toma un aspecto más demoníaco cuando la historia se acerca al enlace.

Otro signo característico es la voz en off. Pues la actriz narra la historia fusionando el chiste en actos con una noticia periodística. Así, cuenta en actos la travesía de una familia desesperada por encontrar ayuda en las instituciones del Estado. Pero no consiguen respuestas.

El parlamento que propone Reto complementa el juego corporal que presenta. Es decir, sin la voz en off, el espectador igual entendería la historia fatídica del personaje, pero sin el tono sugerente de sarcasmo. Así, la voz en off sirve de guía para lograr ironizar la situación.

En la obra, la agredida toma el papel burlesco. Pues el público de su alrededor carcajea por su desdicha. Así, la relación de estas variables otorga ironía a la comedia.

Al final de la obra, Reto propone un reclamo a las autoridades e instituciones. Así, acusa completando el título de la obra con las siguientes palabras: Poder Judicial, Estado, colegio, Iglesia, Dios, etc. En ese sentido, Cuando _no te protege se convierte en una sátira a las “leyes” de la sociedad. Pues estas están hechas para defender, pero en realidad no cumplen con su objetivo: solo protegen al culpable por su minoría de edad.

Cuando _no te protege realiza una acusación a los medios de información, el Estado y la sociedad. Pues aún existe la injusticia, que deja impune al malhechor. La víctima, que en este caso es la mujer, no recibe la protección necesaria que le brinde seguridad para vivir en un mundo civilizado. Aún vivimos en una sociedad que invisibiliza cualquier agravio contra la mujer; o se centra más en criticarlas por haber sido violentadas.

En resumen, Reto propone una obra que ridiculiza el accionar de las instituciones del Estado y la sociedad frente a una injusticia contra una niña. Además, juega con varios objetos teatrales que suman a su propuesta. El lazo, las trenzas, la tela negra, la voz en off y el comportamiento del personaje fueron los signos más explotados y que sumaron a su obra.

Elio Rodríguez

16 de febrero de 2021

No hay comentarios: