Sin duda, un clásico moderno de la dramaturgia latinoamericana es Cita a ciegas, del escritor argentino Mario Diament. Llevada a escena en 2007 y 2016, la pieza regresa este año en el acogedor Teatro de Lucía, bajo la cuidada y prolija dirección de Nazira Atala. Esta historia de amores y desamores entre cuatro personajes, muy distintos entre sí, gira en torno a un viejo escritor ciego, que pasa sus días descansando tranquilamente en la banca de un parque. Pero esta aparente tranquilidad que se respira en las primeras escenas esconde un trasfondo bastante sórdido y violento, pues la naturaleza humana siempre será capaz de los actos más atroces, así como de las muestras de afecto más sinceras.
Una joven escultora (Valquiria Che-Piu) y un empleado bancario (Luis Jesús) mantienen diálogos “casuales” por separado con el escritor invidente (Paco Caparó); mientras que en el consultorio de una terapista (Luisa María Tafur), una mujer (Jennifer Gorriti) revela pasajes de su frustración marital. Lo que al inicio pareciera ser una serie de escenas independientes sin ninguna conexión, Diament las cruza hábilmente por los azares del destino. Como bien puede desprenderse de ciertas lecturas, puede que toda la trama sea parte de la imaginación del escritor, claramente este inspirado en Borges; sea como fuere, los personajes se encuentran bien delineados, y el suspenso y el interés aumentan progresivamente.
Con una propuesta minimalista, Atala logra darle la atmósfera apropiada a la puesta, recurriendo a un discreto pero significativo diseño de luces, que acompañan las emociones que van experimentando los personajes. Este es un texto con muchos diálogos, que exige un elenco que sepa aprovecharlos al máximo; en ese sentido, todos los actores lucen muy creíbles y sólidos, especialmente Caparó, quien retoma en buena forma su personaje desde la última temporada, y Che-Piu. Esta nueva versión de Cita a ciegas mantiene el misterio de las casualidades que aparecen en nuestras vidas, como también nos muestra buena parte de lo contradictoria que puede llegar a ser la naturaleza humana.
Sergio Velarde
8 de junio de 2024
No hay comentarios:
Publicar un comentario