Teatrista, el camino se hace al caminar
Cuando los cuerpos sobresalen en un espectáculo y son dueños
de la función, siempre logran cautivar las miradas del invitado y este se rinde
ante su magia, que fue forjada con el inseparable y metódico trajín de la
técnica escénica, escalera que le permite ser dueño de su voz de su cuerpo y de
su momento.
Sean cuales fuere, estas afirmaciones no están exentas de ser
observadas y atendidas de manera específica, es sabido que todos deseamos ver
una puesta escénica que nos agrade o que provoque algún tipo de reacción en el
desarrollo de su historia.
Ya en los últimos días del mes pasado, se realizó el “Festival
de Teatro Universitario” con la participación de los estudiantes de la
universidad de San Cristóbal de Huamanga, con una programación sencilla,
austera, con matices intensos de entusiasmo, alegría, nervios y tensiones
escénicas tras bambalinas.
Jóvenes estudiantes, muy motivados por representar sus
personajes en las variadas puestas escénicas que hicieron el deleite a los
asistentes; sin embargo, no dejan de ser trabajos muy iniciales, por sus
múltiples carencias que ya no es necesario detallar. No obstante, es muy
meritorio e importante para establecer las bases de una iniciación artística escénica,
tanto para el público como para los que están sobre el escenario, que son poco
asiduos concurrentes a este tipo de espectáculos; todos conocemos ese dicho que
nadie nace sabiendo y en muchas de las ocasiones, es en el camino en donde se
aprende.
Considero de muy buena iniciativa de parte de esta Facultad
de Educación, el cual estuvo ejecutada, direccionada y animada por el profesor
Daniel Quispe, aunque pareciera que este evento fuese una decisión de última
hora por la manera como se estuvo desarrollando minutos antes de cada
representación, lo cual no creo que sea así, pero dejó esa impresión. En conclusión,
no se desmerece de ninguna manera este evento, que fue representado por futuros
maestros, que son quienes estarán al frente de alumnos y de seguro, también estarán
expuestos en situaciones donde tengan que opinar y recrear obras literarias,
donde tal vez algún director o colega de colegio le diga de manera entusiasta o
generosa que se encargue de hacer una escena teatral y bueno, él o ella ya
tendrá algún elemento para poder construir con cierto criterio una composición teatral,
lo cual de seguro necesitara mayor tecnicismo y múltiples requerimientos
necesarios para un puesta escénica.
Pero así se hace el camino al caminar; considero esta
actividad de mucha importancia, al proporcionarles herramientas y manejos
elementales de creación escénica a estos estudiantes, puesto que se está formando
a futuras personas que estarán en un proceso creativo con alumnos. Por lo tanto,
es una actividad que mueve la cultura teatral en futuros maestros, que se verán
en algún evento realizando teatro, algunos de ellos asistiendo a talleres para
mejorar u otros, pidiendo asesorías para poder armar sus puestas teatrales.
Es plausible y saludable para nuestra cultura apoyar estos
eventos, pues estos son los posibles semilleros de nuestra cultura teatral en
nuestra zona.
Edgar Palomino Medina
Ayacucho, 3 de febrero de 2019
No hay comentarios:
Publicar un comentario