Feliz regreso a los escenarios
Las ganas los artistas por volver a los escenarios y ofrecer
espectáculos presenciales se hicieron sentir desde el primer día de encierro
forzado, especialmente con la creciente saturación de obras en línea de los
últimos meses. Poco a poco, la comunidad teatral empezó a retomar los ensayos
en sala y las funciones en vivo (como en el fondo debe ser el Teatro), cuando
las medidas dictadas por el gobierno así lo permitieron; no obstante, se optó
en general, por presentar espectáculos sencillos de corta duración. Uno de
estos lugares fue el Espacio Teatro Esencia, que tuvo y tiene actualmente una
intensa actividad; una obra que desfiló por su escenario fue Un viaje hacia Plutano, escrita por
Jorge Bazalar y dirigida por Renato Piaggio.
Presentada por Kapchiy Asociación Cultural, la pieza breve
nos presenta a dos niños, Tato (Alejandro Tagle) y Patty (Astrid Villavicencio),
quienes se conocen en un ascensor que repentinamente queda fuera de servicio
con ellos dentro; él es un boy scout
asmático y ella, una perspicaz analfabeta. Ante la eventualidad, ambos darán
rienda suelta a su imaginación e iniciarán un viaje espacial hasta lugares
desconocidos, como el planeta del título. La escenografía funcional, las luces
y el sonido permiten aprovechar el íntimo espacio barranquino, creando la
atmósfera requerida; además, la dirección de Piaggio permite seguir la acción
con interés.
Interpretar a niños no es tarea fácil para los actores
adultos; no obstante, Villavicencio y Tagle, ambos en constante actividad
interpretativa, se las arreglan para entrar en la convención y ejecutar sus
roles con convicción. Los dos actores consiguen una buena química y resultan
carismáticos sin llegar a la sobreactuación, delineando bien a sus personajes. Un viaje a Plutano, tal como lo menciona
Bazalar, es producto de un ejercicio de un taller de dramaturgia, pero su
puesta teatral se convierte en una divertida y agradable historia, que bien
valió la pena disfrutar en el expectante regreso de los teatristas a la
presencialidad.
Sergio Velarde
28 de enero de 2022
No hay comentarios:
Publicar un comentario