Conjurando al Bardo de Avon
Ricardo Morante (actor, dramaturgo y director del grupo Aqualuna) no le
tiembla la mano para proponer nuevas versiones de clásicos de la literatura peruana
y mundial, así como presentarlos de manera poco convencional. Adaptó nuestro texto
costumbrista por excelencia, El Sargento Canuto de Manuel A. Segura, para
estrenarlo en tiempo de marinera limeña; y dirigió con un estilo tan “modernista”
como irreverente, el drama de Esquilo, Prometeo encadenado, en medio de abundantes
efectos visuales y sonoros, cambiando las cadenas por telas. Este año, rinde
homenaje a William Shakespeare, con su particular estilo. Todas somos Julieta,
presentándose actualmente en el Teatro Auditorio Miraflores, nos muestra la
influencia del Bardo en el universo femenino contemporáneo.
La puesta en escena se deja ver por su sencillez y a la vez, por la ingenuidad
que destilan sus protagonistas. Cinco amigas se reúnen en casa de una de ellas,
luego de cuatro años sin verse. Un inocente juego del Tarot revela que una de
ellas quiere terminar con su vida, mientras aparece en las cartas el nombre de
Julieta. Este trágico personaje shakespeariano parece ser el punto en común que
tienen las chicas. Para averiguar quién sería la posible suicida, cada una tendrá
su momento para contar algún difícil momento de su vida sentimental, mientras
leen el libreto de “Romeo y Julieta”, que trae una de ellas. Si bien el
misterio se resuelve acaso, de una manera un tanto forzada, queda claro el
inmenso legado del Bardo en nuestras vidas.
Con una escenografía sencilla, y sacándole el jugo a las luces con las
que cuenta el teatro, la figura de Julieta se percibe en el ambiente, así como
atisbos de otros personajes de otras obras capitales del autor como Sueño de
una noche de verano, El mercader de Venecia, Otelo y La fierecilla domada. Acaso,
el mayor mérito de las actrices Katherina Sánchez, Inés
Sadovnic, Patricia Moncada, Sofía Muñoz y Zadith Prada sea el de
haber logrado conjurar en varios momentos al indispensable espíritu de
Shakespeare sobre el escenario. Todas somos Julieta, decimonoveno montaje del
colectivo Aqualuna, es un discreto e interesante ejercicio teatral, muy fiel al
estilo del experimentado director Ricardo Morante.
Sergio Velarde
27 de junio de 2015
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