lunes, 10 de octubre de 2011

Crítica: TODAS LAS SANGRES

Arguedas siempre vigente

Sumándose al centenario del nacimiento de José María Arguedas, como ya lo hiciera el grupo Teatro del Sol y su obra Mitos de fuego, el Taller de Teatro Zapatos Rotos rinde homenaje a nuestro ilustre hombre de letras, quien reivindica como ningún otro a los forjadores andinos. Acaso lo que diferencia a Arguedas de otros indigenistas es el ver al indio desde dentro. Despreciado por su madrastra al morir su padre, es obligado a dormir en la cocina con los indios y convivir con ellos. Es por ello que en su obra involucra aspectos económicos, sociales, políticos y religiosos dentro de la cultura occidental, revalorando al mundo andino, la comunión con la naturaleza y especialmente, la justicia.

La trascendental obra de José María Arguedas, Todas las sangres, adaptada al teatro por Áureo Sotelo y presentada por el Consorcio Cultural La Compañía en Los Olivos, es un crudo retrato de la situación social del gamonalismo andino anterior a la reforma agraria de Velasco. El suicidio del viejo hacendado Andrés Aragón y Peralta (Freddy Miranda) provoca que su herencia sea repartida entre sus hijos Bruno (Roger Guerrero) y Fermín (Martín Sepúlveda), ambos con caracteres muy diferentes. En medio de ellos, el minero Rendón Willka (Miguel Cano) se convierte en el digno héroe que defiende los derechos de los indios; mientras que el inescrupuloso ingeniero Cabrejos (Jhimi Zegarra), en el malvado intrigante que sólo busca su conveniencia económica.

El director Arturo Fernández saca partido a su joven y numeroso elenco, muy entusiasta y enérgico, para mantener el ritmo de la obra interpretando a varios personajes cada uno; además de aprovechar el reducido espacio que dispone con paneles y cubos. La utilización de algunas máscaras y el vestuario enriquecen la puesta, así como el baile y música en vivo. Acaso el recargado maquillaje en las caracterizaciones, como en el caso del patriarca don Andrés, desentone debido a la cercanía del público con los actores. Los movimientos corporales durante las escenas con diálogo son coherentes, pero también deberían estar presentes en las escenas con Matilde (Ginger Apaza). A destacar también el personaje de Asunta (Sandra Quiroz), muy preciso y convincente. Todas las Sangres de Arguedas es una obra coral en donde se encuentran todas las razas y culturas del Perú, y que el Taller de Teatro Zapatos Rotos se encarga de mantener vigente.

Sergio Velarde
10 de octubre de 2011

1 comentario:

Unknown dijo...

Todas las sangres de José María Arguedas en mi opinión se trata de la lucha de lo tradicional con resistirse a los cambios del futuro. Es una disputa entre dos hermanos que tienen una idea diferente en cuanto a seguir las corrientes capitalistas.