Fidelidad al material original
Hace exactamente diez años, Oficio Crítico asistió al Centro
Español del Perú para apreciar la teatralización de Los cachorros, capital
novela corta de Vargas Llosa, adaptada y dirigida por Miguel Pastor, con la
colaboración de su esposa Carmela Izurieta y su productora El Juglar. El
resultado: un notable ejercicio escénico que no solo se enriquecía del trabajo
actoral en conjunto, con un inspirado Juan Carlos Pastor (hijo del director) a
la cabeza, sino que se ajustaba con mucho respeto al material original. Armado
de unos cuantos cubos, sillas y una mesa, el director Pastor consiguió una
conmovedora puesta en escena, con la tragicómica historia de “Pichula” Cuéllar,
quien tras ser castrado por un perro siendo un niño en su colegio, debe
sobrevivir en una conservadora ciudad, como lo fue la Lima de los años 60.
Acaso el mayor logro de Pastor sea el de generar, en
complicidad con su elenco, una real atmósfera de aquella época, a través de una
correcta valoración del texto. Las acciones de los actores son fluidas y consiguen
veracidad en escena. Los personajes secundarios son interpretados por los
mismos actores con bastante convicción. Eso sí, Pastor vuelve a apostar por
grabaciones de las voces de los padres de Cuéllar, que interfieren, aunque sea
por algunos segundos, con el desenvolvimiento general de la puesta; que los
mismos actores asuman estos personajes podría ser una opción. Siempre es
posible mejorar aún más la precisión de los cambios en escena, aquellos
detalles se irán afinando a lo largo de las funciones que le restan a esta
temporada itinerante.
En cuanto al nuevo elenco, la elección de Sergio Armasgo
como el Cuéllar de esta década no pudo ser más acertada: enérgico, carismático
y conmovedor, Armasgo logra un perfecto equilibro entre la tragedia que le tocó
vivir a su personaje, sin descuidar su lado humano, matizado con un agradecido
sentido del humor. A su lado, el cuarteto conformado por David Camargo (Lalo), Alejandro
Baca (Choto), Manuel Baca Solsol (Mañuco) y Gabriel Soto (Chingolo) ejecuta con
mucha convicción y precisión su rol de narradores de las peripecias de Cuéllar,
delineando bien a sus respectivos personajes. Las damas, Viviana Pereyra,
Estefanía Cortés, Abril Cárdenas, Sofía Espantoso y Carolina Infante (única
“sobreviviente” de los elencos originales), suman a la puesta a pesar del corto
tiempo que disponen en escena para desarrollar sus personajes. Los cachorros mantiene
y respeta el espíritu de nuestro premio Nobel en sus primeros años como literato y esa es su principal fortaleza.
Las funciones de Los cachorros continuarán en el Teatro del
Centro Cultural CAFAE-SE y en la Asociación de Artistas Aficionados.
Sergio Velarde
29 de septiembre de 2019