“En Culturalia, somos personas con muchas ganas de
crear y difundir el arte.”
En junio de este año, Culturalia inició sus
actividades como Centro Cultural virtual mediante su página web, en la cual se
puede acceder a distintos trabajos que abarcan disciplinas como las artes
escénicas, las artes plásticas y el concepto audiovisual. Para conocer un poco
más acerca del proyecto, Oficio Crítico conversó con Romina Ortega, gestora y productora
del mismo.
Un
comienzo entusiasta y los cambios necesarios frente a la pandemia
Serendipia, productora que hace tres años
viene realizando propuestas teatrales y audiovisuales, fue el primer
emprendimiento en sociedad entre Romina y Jesús Álvarez Betancourt, a quien
conoció en el campo cinematográfico. “Lo
conocí en una película que se llama El candidato donde él hacía de productor y
yo hacía producción de arte, hicimos ‘clic’ laboral, intentamos un proyecto
previo que no funcionó y finalmente decidimos abrir nuestra propia productora
que se llama Serendipia. Como cualquier productora en este medio, detectamos
que había una necesidad de crear espacios físicos donde pudieran haber
experiencias, contenidos, a la vanguardia, en los que realmente uno pudiera
colocar obras, performances o en general cualquier expresión artística, pero
sin tanto tiempo previo, porque las convocatorias a los teatros, a veces, se
dan con un año de anticipación”.
Bajo esa premisa, en octubre del año
pasado, surgió la idea de crear un espacio propio, la cual se concretó a
inicios del 2020. “(Jesús Álvarez y yo) Nos
empezamos a juntar con otros amigos que forman parte de este proyecto: Eduardo
Noguchi, Erika Álvarez y Patricia Pérez Villareal, porque queríamos realmente
que exista un espacio así, donde la gente se sintiera libre, donde importara lo
que quieres contar y no de donde vengas (…). Culturalia nace de la iniciativa de crear un espacio de convergencia,
un lugar donde artistas, gestores y el público pudieran reunirse a crear,
intercambiar y difundir manifestaciones de todas las ramas del arte: escénicas,
audiovisuales, cinematográficas, plásticas, etc. Incluso desde la creación del
nombre, buscábamos que se sintiera como si formáramos una nación nueva, sin
fronteras”, aseveró.
La complicada situación que viene afectando
al rubro cultural debido a la pandemia, no ha sido ajena al proyecto, pues hace
unos días tuvieron que dejar el local que albergaría a sus eventos presenciales,
situación que llevó al equipo a replantear sus prioridades. “(…) Teníamos que acercarnos al público, y el
público está en internet; además el público necesita experiencias culturales,
así que Culturalia seguirá siendo un proyecto presencial espero que a futuro,
pero tenemos que actuar ahora, por eso nos lanzamos como Centro Cultural
virtual (…) Nunca dejamos de trabajar
y desde junio que lanzamos la propuesta, de manera formal, seguimos
esforzándonos por programar contenidos que persigan la esencia que intentamos
proyectar desde un inicio. Para nosotros, Culturalia significa “compartir,
crear y conocer”. Esas tres palabras son el motor y motivo de todo lo que
hacemos, pues incentivamos la creación, generar intercambio y difundir las
distintas expresiones artísticas a la comunidad”.
Los
retos de la virtualidad y la diversidad de contenidos en Culturalia
Mudarse rápidamente al terreno virtual, ha
servido como un valioso aprendizaje para los miembros de Culturalia, y como en
todo proceso, los desafíos y las fortalezas están presentes. “(Uno de los retos)
La adaptación al nuevo medio. Si bien el
internet es una herramienta que hemos utilizado siempre los gestores para
convocar a nuestro público, esta vez hemos tenido que aprender (y muy rápido) a
verlo más allá de un canal de difusión. Se ha vuelto nuestro “escenario”. Y
nosotros nos hemos convertido en programadores web, community managers, UX, y
seguimos explorando… Antes el aforo de una sala te marcaba el límite de una
función. Hoy, ¡tus redes son el límite! Por otro lado, considero que la
principal fortaleza es nuestra capacidad de lograr esa adaptación. Sabemos que
hasta que podamos recibir al público de forma presencial van a pasar meses. Sin
embargo, teníamos muy claro que no podíamos quedarnos con los brazos cruzados: si
el público no iba a acudir donde nosotros, nosotros debíamos ir a buscarlos.
¿Dónde? A la comodidad de sus casas, en sus redes, en internet. Por ese motivo,
sentimos que tomamos una gran decisión al cambiar todo el modelo y adaptar
nuestro centro cultural a esta llamada “nueva normalidad”. Y a pesar de la
incertidumbre, estamos orgullosos de haberla emprendido”.
Como ya se mencionó en la introducción, Culturalia
tiene una oferta variada en su programación, la cual, busca integrar en un solo
lugar distintas ramas artísticas.
“Como
Centro Cultural nos dimos cuenta que teníamos que tener diferentes áreas que
abarcaran las expresiones artísticas. Tenemos la unidad de Artes Escénicas, la
unidad de Artes Plásticas, de Cine, la unidad de Formación, y la Comunidad…
todas han estado funcionando a través de nuestra web; en Artes Plásticas, el 12
de agosto lanzamos la galería virtual, que es un espacio donde hemos convocado
dos secciones: Una artista del mes, que en este caso es Silvia Westphalen,
escultora peruana reconocida en el mundo y en el país, que además admiro mucho.
Aparte también convocamos artistas de muchos lados del mundo para una Sección
de mujeres que compartieran su arte, la que hemos llamado ‘La exposición permanente’;
entonces, la galería está en la web y es libre para quien quiera verla, incluso
conocer un poco más de las artistas, de sus procesos. Por otro lado, en cine,
probamos una experiencia lanzando Sobredosis de amor, que es una película de
Jesús (Álvarez) en la que también hice dirección de arte, así que es un
proyecto de ambos, el cual recibió el apoyo del público. Sin embargo, nos hemos
enfocado en las Artes escénicas, y nos daba un poco de miedo hacer teatro
virtual por el tema de la conexión; he sido público de muchas funciones que
lamentablemente han sido canceladas por el problema de la conexión, entonces,
reaccionando a eso, dijimos mejor trabajemos lecturas dramatizadas siempre con
la esencia de Culturalia que es una nación sin fronteras, donde invitamos
artistas de distintas partes del mundo para que interpreten estas lecturas; y
demos a conocer también textos de otros países junto con Perú, y generar este
intercambio cultural. Así nace Teatro sin fronteras, ya hemos trabajado tres
obras con cuatro países: Perú, Argentina, México y España y hasta ahora nos ha
ido muy bien; la idea es tener el acceso para ver la lectura en el momento que
tú quieras, donde quieras, no es en vivo, pero igual la experiencia va más allá
de ver la lectura, sino también conocer qué hay detrás del texto, conocer a los
actores y un poco de su experiencia; entonces, por ahí va siempre Culturalia,
no solo exponiendo algo sino también contándote cómo ha sido llegar a eso”.
Teatro
sin fronteras y los planes a futuro
Respecto a los comienzos y convocatoria de Teatro
sin Fronteras Romina comenta: “A pesar de
lo denso de esta etapa (pandemia),
nos dimos cuenta que había una necesidad de querer hacer, de contar, que no
solo partía de aquí (Perú) sino que
también lo veíamos en otros países. Nosotros tenemos amigos peruanos que han
salido a otros países y yo he tenido la oportunidad de estudiar fuera,
entonces, conocimos personas que estaban dispuestas a formar parte de este
intercambio cultural… Teatro sin fronteras ha sido una apuesta por parte de
todos, y los resultados han sido hermosos. Por ejemplo, en la primera obra
estuvo Marisa Minetti, que es muy amiga de nosotros y hemos trabajado con ella
en varios proyectos, entonces, ella trajo a los amigos con los que trabajaba,
gente de su escuela. Convocamos también a Wil León, Janncarlo Torrese y así,
poco a poco, en realidad todo ha sido por pasada de voz y también el querer
formar parte (…) la intención es
generar esta experiencia para los actores, directores y dramaturgos y escuchar
qué es lo que puede sentir alguien de México sobre Laberinto de Monstruos, que
es una obra tan local y de una época en concreto. O cómo los actores peruanos
pueden interpretar Lobos por Corderos, una obra mexicana que habla de un hecho
real… ese intercambio de perspectivas ha nutrido tanto a Teatro sin fronteras
como a todos los que hemos formado parte de este proyecto”.
A propósito, las obras que forman parte de Teatro
son fronteras son:
El acto gratuito
de Gonzalo Demaría (Argentina),
Laberinto
de monstruos de César de María (Perú) y
Lobos
por corderos de Reynolds Robledo (México), las cuales ya se encuentran disponibles
para el público hasta el 12 de septiembre.
En cuanto a los planes a corto plazo, Culturalia
presentará su nueva programación y una segunda entrega de Teatro sin fronteras,
con la obra Demonios en la piel de
Eduardo Adrianzén (Perú) y A riesgo de parada
cardíaca de Verónica Jiménez (España). “Son
textos maravillosos, y está integrado por gente de esos países… Además, muy aparte de que volvamos a lo
presencial (que es lo que todos queremos), la tecnología no solamente, es el
canal por el que pasan las cosas, sino que se ha vuelto nuestro escenario, es
una herramienta que tenemos que aprender a usar, que seguimos explorándola y
que se ha vuelto una oportunidad para todos nosotros… Como galería, a partir de
la quincena de septiembre, tendremos a un nuevo artista, peruano, el nombre aún
no lo revelaré, ya lo estaremos comentando. Por otro lado tenemos en la programación
nuestro 1er Seminario de Distribución de Cine, organizado entre Bf Distribution
y Culturalia, donde los participantes tendrán la oportunidad de conocer de
cerca cómo funciona el mercado cinematográfico, analizar estrategias de
marketing y así descubrir la mejor manera de sacar a la luz una película.
Entonces, estos serían nuestros contenidos de manera inmediata, con nuestra
premisa de seguir abriendo fronteras”.
Para concluir, Romina nos deja el siguiente
mensaje: “Que la gente sepa que es bienvenida,
que las personas se sientan con la entera confianza de acerca a preguntar; las
redes las llevamos nosotros, o sea estamos ahí, somos personas de carne y hueso
con muchas ganas de crear, con muchas ganas de difundir arte y estamos
esperando a todos, para que formen parte de esta comunidad”.
-Página web de Culturalia: https://www.culturalia.pe/
-Instagram: culturalia.pe
-Facebook: Culturalia - Centro Cultural
Maria
Cristina Mory Cárdenas
9 de setiembre de 2020