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jueves, 25 de mayo de 2023

Crítica: LA HUELGA


Solidaridad de clase

¿Se puede vivir en un país en duelo? La huelga de Federico Abril es una comedia muy actual y que se puede resumir en una palabra: valiente. No es para menos, pues el elenco aborda, de manera dramáticamente bien hecha, dos temas sociales importantes: el derecho al trabajo y la coyuntura actual en el país. En una escena se ironiza con la imagen de la misma presidenta de la república de manera muy perspicaz. No es para menos mi comentario, pues hace unas semanas, el colectivo teatral La Cuarta Pared fue atacado por un espectador iracundo, mientras la obra El Joker representaba una temática similar. (1)

Desde hace unos meses estoy leyendo con profunda seriedad académica la teoría teatral de clásicos como Konstantín Stanislavski y se me vino a la memoria una cita muy acorde con este montaje: “El teatro, por su publicidad y aspecto, llega ser un arma de doble filo, cumple un rol social, y por otro anima a los que quieren explotar nuestro arte. Estos últimos aprovechan la ignorancia de unos y el mal gusto de otros, recurren a favoritismos que nada tienen que ver con la creación. Debemos luchar contra ellos con la mayor energía, hasta expulsarlos de la escena”. (2) El personaje de la asistente huelguista (Nicole Posso) pone una dosis brechtiana, pues interpela a los artistas por su indolencia frente a una crisis de derechos humanos básicos en la sociedad. Me gustó que el personaje de Posso fuera impactante e inquisidor y por momentos, intimidante. Por otro lado, la escena que envolvió al público en risas fue la singular satirización de un montaje de romanticismo barato. La interpretación de Carlos (Alfredo Motta), un director de teatro frustrado e iracundo, fue muy creíble y equilibrada. Me gustó que se empleara el diálogo absurdo para llamar la atención. Por último, el asistente interpretado por Antonio Farfán tuvo un trabajo de cuerpo y presencia escénica importante, por trabajar aún su proyección de voz.

Tocando aspectos técnicos del montaje, creo que extrañé la música en las escenas. Siempre la música o efectos de sonido nos ayudan emotivamente a ubicarnos y diferenciar a los personajes. De otro lado, la utilería fue más que minimalista, lo cual daba un aire de vacío. Esto último como que no correspondería con el preámbulo de un montaje tan espectacular, como el del director de teatro. Finalmente, el montaje termina muy rápido y deja en el espectador una necesidad de querer seguir viendo. Este sería el matiz sobre el cual se centra mi crítica: la dramaturgia, pues considero que pudo ser aún mucho más compleja y ahondar en los personajes de Posso y Motta. La huelga de Federico Abril es original, crítica y valiente. Vayan a verla este fin de semana que aún está en cartelera.

Enrique Pacheco

25 de mayo de 2023

(1) Tensión: en Perú, atacaron a un actor local mientras interpretaba El Joker

https://vivelaplata.com.ar/tension-en-peru-atacaron-a-un-actor-local-mientras-interpretaba-el-joker/?fbclid=IwAR0FlNaJjlizw1KqOs5YkYDJ_Xx9ay9rE4JxYU40069ok_QOEOj9PHkGSGU

(2) Konstantín Stanislavski. El trabajo del actor sobre sí mismo. Capítulo 2.

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