El amor se va de viaje
La entrada de Bollywood al Perú es
relativamente reciente en las salas de cine peruanas: se entrenó Contra viento y marea en 2013. Sin
embargo, para el reciente montaje del mismo nombre fue innovador en el hecho de
adaptar la película en un espectáculo teatral. Sin lugar a dudas, se notó las
dificultades para plantear las mismas situaciones de la película en escenas; en
ese sentido, hay que resaltar el esfuerzo que hizo la productora Cabac Teatro y
el director Mario Gaviria.
El montaje solo contó con dos fechas, pero
la asistencia del público fue masiva. Lo primero que sorprendió fue que no solo
se trató de un montaje, sino de un musical con una serie de bailarines en
diferentes intermedios de las escenas con sus respectivas vestimentas. Las
coreografías fueron coordinadas, pero les faltó más presencia escénica, más
energía. Por otro lado, tocando el tema de las actuaciones, el elenco fue numeroso
y los nombres de los personajes, aparte de estar en otro idioma, generaba un
poco de confusión. Tal vez una castellanización de los personajes habría
ayudado a que se entendiera quién era cada uno de los protagonistas. Hubo un
momento en el que confundí a la mamá (Layo) con Simran. El soundpainting, como
manera de comunicarse con el público, fue interesante e innovador.
Tocando el tema de algunos aspectos estéticos,
fue un poco decepcionante el tema del maquillaje. Algunos actores usaban
bigotes pintados, lo cual no era atractivo; sin embargo, el vestuario de actrices
y actores fue muy bueno: los acabados y la similitud con las vestimentas de La India,
sobre todo en la escena de la boda, fueron de reconocer, debido a la evidente
dificultad de lograr esos acabados similares en el color y las texturas.
También hizo falta un poco de música en vivo, especialmente al momento de tocar
la guitarra, para que el espectáculo fuera más atractivo. El canto fue
entendible que haya sido con playback, pues las canciones estaban en hindú y
que un actor llegue a entonar, cantar y pronunciar bien un idioma tan complejo
como este habría sido demasiado difícil.
De todas las actuaciones, la más destacable
y creíble fue la de Miguel Soriano, interpretando al actor indio Shahrukh Khan
y su personaje Raj. Fue realmente potente en sus acciones, su mirada fija, sus
gestos y sus intenciones en las diversas escenas generaban conexión con el
público. De hecho, fue el que más risas generó entre los asistentes, debido a
sus alocuciones graciosas. En general se puede mencionar que el resto de
actores, como Sary Álvarez, Claudia Campos, Franco Ocaña, Sol Nacarino, Mario
Villacorta, Gian Paul Miranda, Erick Cumpa, Andrea Carpena y Alejandro Holguín
interpretaron bien a sus personajes. Se puede decir que Contra viento y marea fue un espectáculo musical bastante simpático,
atractivo e innovador, y fue un gran intento de empezar a conectarnos con una
cultura y un país, muchas veces tan lejano a nuestra realidad, como La India. El
estreno de montajes de directores o dramaturgos de La India en teatros peruanos
sería muy interesante, pues no se suele saber mucho del teatro en ese país.
Enrique Pacheco
6 de noviembre de 2019
Muchas gracias por la crítica. Debido a la asistencia masica, Cabac volverá a montar la obra en febrero, en la cual consideraremos los aspectos aquí descritos, con mucha técnica y cariño. Gracias por asistir. Saludos!
ResponderEliminarQue excelente que la vuelvan a poner.en el teatro. Lindaaaaa obraaaa. Éxitos Totales. 👏👏👏👏👏👏
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