Páginas

martes, 29 de junio de 2021

Crítica: JUZGADO DE FAMILIA NÚMERO 6


Es solo un caso más

El teatro nunca debe perder su capacidad transformadora, la de tocar las fibras más sensibles de los espectadores para incomodarlos, sacudirlos emocionalmente y provocar reacciones, a través de historias que nos hagan crecer como sociedad. Y en estos tiempos, desde la virtualidad, con mayor razón. No debería bastar solo con entretener. Es por ello que siempre debe celebrarse cuando un montaje escénico, armado con recursos mínimos, alcanza estos niveles transformadores. Contados elementos, tema relevante, enormes resultados. Ese es el caso de /Otro/colectivo Teatro y el preestreno de Juzgado de Familia Número 6, puesta creada e interpretada por Nani Pease, con la dirección de Tirso Causillas, y que tendrá una temporada oficial durante este año.

Se mencionaba los contados elementos, ya que la obra virtual cuenta solo con Pease, su aro de luz, algo de música incidental y la cámara; con todo ello se crean las diversas atmósferas para contar la historia. Y es que el tema no puede ser más relevante y desgarrador. Luego de una corta dinámica dirigida por la actriz con los espectadores, nos preparamos para conocer la historia de una mujer que atraviesa mil y un obstáculos para denunciar un hecho ante el sistema de justicia. Los pormenores son lo de menos, y es ahí donde radica la mayor fortaleza del proyecto, pues son la negligencia, la desidia, el machismo, la burla, la injusticia y la barbarie las grandes protagonistas en la historia de esta mujer, una víctima más de la incapacidad del Estado para impartir justicia. Como esta mujer hay miles. Es por ello que, lamentablemente, se trata solo de “un caso más”. Y eso es lo que duele.

Los enormes resultados que consigue Juzgado de Familia Número 6 se deben a la cuidada y estilizada dirección de Causillas, así como a la poderosa actuación de Pease; la voz, la fuerza, la valentía y la indignación que le presta a esta mujer no producen ningún efecto en los administradores de justicia de la ficción, pero sí que incomoda y sacude al espectador en el mundo real. Y además, saber que este doloroso mundo de ficción que nos muestran Pease y Causillas no deja de ser una dura realidad. Esta pieza es parte de una investigación-creación artística, en el marco del proceso de obtención de Licenciatura en Creación y Producción Escénica por la PUCP de Tirso Causillas con la asesoría de Lorena Pastor, y presentada en el Encuentro de Derechos Humanos de Idehpucp. La temporada oficial de Juzgado de Familia Número 6 debería ser de visión obligatoria para toda nuestra comunidad, para que nunca más la denuncia de una mujer se convierta simplemente en “un caso más”.

Sergio Velarde

29 de junio de 2021

No hay comentarios:

Publicar un comentario