Trío de mujeres al límite
Tres retratos de mujeres, tres culturas, tres religiones,
tres trayectorias de vida, en contraposición a la inminente fecha de un ataque
terrorista. Las mujeres en cuestión son Eden Golan (Urpi Gibbons), profesora de
historia judía; Mina Wilkinson (Kareen Spano), militar norteamericana; y Shirin
Akhras (Jely Reátegui), joven estudiante palestina. Estos variados puntos de
vista se van entretejiendo a lo largo del montaje, atravesando muchos momentos
vertiginosos hasta terminar en el eterno e inútil sacrificio. Escrito por el
dramaturgo italiano Stefano Massini en 2010 (antes de los recientes atentados
terroristas de los últimos años), Creoenunsolodios es un texto que profundiza y
escudriña en las motivaciones que generan ese terror tan latente y actual,
motivando la reflexión en el espectador sobre sus posibles causas y por supuesto, en sus terribles
consecuencias.
Este cruce de intensos monólogos sobre el conflicto
árabe-israelí mantiene la atención del público de principio a fin: la joven Shirin
transpira el miedo y la ansiedad que significa la planificación de la muerte de
cientos de personas, con el propósito de convertirse en mártir; mientras que
Eden se revela como una ferviente pacifista, encarnando la visión intercultural
del conflicto, confiada en la importancia del diálogo para construir la paz. Por
su parte, la postura de Mina sea acaso la más polémica, pues habla con total cinismo
acerca del papel de los Estados Unidos en el conflicto, en donde el interés
económico es el que mueve las fichas en su tierra natal. El ambiente que genera
la puesta en escena destila en todo momento la violencia requerida para este
tipo de trama.
La directora Nishme Súmar, responsable de creativos trabajos
como el unipersonal Cuerda y otros espectáculos familiares, asume el reto de
llevar a escena un difícil texto con fuerte carga dramática, utilizando con contención
recursos audiovisuales como por ejemplo, la proyección de imágenes, que suman
al montaje, pero acaso sin llegar a los aciertos de puestas como Falsarios
(2013). En todo caso, esta propuesta escénica está al servicio del lucimiento
de las actrices, quienes consiguen un trabajo parejo muy destacable. La puesta
en escena de Creoenusolodios en el Centro Cultural de la Universidad del
Pacífico se convierte entonces, en un inquietante e intenso mosaico de
sentimientos y pensamientos, de los ideales y creencias de las tres protagonistas: la
musulmana, la estadounidense y la judía. Y por supuesto, se trata de un estreno
con total vigencia. Imperdible.
Sergio Velarde
27 de setiembre de 2016